jueves, noviembre 03, 2005

¡Auxilio! Una década en el exilio


Con motivo del décimo aniversario de la muerte de Alvaro Gómez Hurtado, el Politburó del Partido Acción Simbólica y el Comité de Redaccion de Ediciones Clínicas, en conjunto con las cenizas del Movimiento de Salvacion Nacional, publican las siguientes palabras a manera de 'in memoriam':

La historia de Alvaro Gómez Hurtado es la fábula de aquel déspota ilustrado que jamás pudo ejercer el poder que merecía. Ilustre ciudadano, eterno candidato, buen príncipe que nunca contó con el favor de las torpes mayorías; su dramática partida se dio en las condiciones que todos conocemos -a sangre y a fuego- y significó el final de toda una era política en la historia nacional.

Diez años después, a medida que la vida y obra del Sr. Gómez Hurtado se aleja en el mar de nuestra memoria, su figura surte tanto en simpatizantes como en opositores el mismo efecto que un cuadro impresionista puesto en perspectiva. Palmo a palmo descubrimos y vemos cómo su persona era el retrato mismo del estadista. Le cabía en la cabeza la idea del Estado. Había crecido con ella, jugando en palacios con globos terráqueos. Tenía una cultura amplia y un pensamiento estructurado y, además de eso, tenía una pluma, con la que en alguna ocasión escribió un libro graciosamente titulado "Soy libre", e incluso la palabra 'lumpenproletariado'. Era caricaturista de vez en cuando y los fines de semana le gustaba dibujar caballos.

Todo esto para describir ese espíritu elevado, que de haber resultado favorecido por los dados democráticos se hubiera comportado no como un vil capataz sino como un real Jefe de Estado. Aquel hombre que incluso entre sus detractores inspiraba alguna forma de admiración intelectual y respeto en vez de folclor y simple miedo.

Nos preguntamos: ¿Todavía queda algún espacio para la confrontación de ideas en esta patria loba? Basta leer un par de comentarios en los foros de 'El Tiempo' para echarse a llorar y admitir que hemos tocado fondo. Los partidos son pandillas políticas sin programas ni ideales, los prohombres han desaparecido y han sido reemplazados por tecnócratas de cuello blanco con corbatas de papel higiénico. "República bananera, democracia de verduleras", tal como lo sentencia el grafitti de la Cr. 7, consciente de qué es lo que da la tierrita.

Por su parte, en noble labor idealista, 'El Nuevo Siglo' sigue repartiendo "el pensamiento de Alvaro Gómez" todas las mañanas -en estampitas coleccionables- seguidas de la leyenda "10 años de su asesinato impune". Desde el Tribunal de la Historia, pensamos que al fin y al cabo poco importa que el crimen quede impune, pues finalmente el talión es un recurso juridico de la canallada y nuestro cliente no es ni perdedor malo ni machito santandereano.

Las décadas pasan y la muerte sigue ahí, a la vuelta de la esquina. A unos los coge en haciendo proselitismo en Soacha, a otros después del desayuno, rumbo a su cátedra matutina. Pasa el tiempo y el candidato presidencial liberal (q.e.p.d) ahora aparece en los bluyines del mequetrefe de Carlos Vives. ¡Vaya orgullo patrio! En cuanto a nuestro Alvaro (r.i.p.), por ahí le hicieron un busto patricio, algo más discreto. A sabiendas de lo fácil que es hablar bien de los muertos, y hacer santos de mártires cualquiera, no nos extenderemos más. Por hoy, sólo queríamos criticar a los vivos y recordar con afecto a Alvaro Gomez Hurtado.

Si desea, puede firmar desde ahora la petición que enviaremos al Panteón para que el Sr. Gómez Hurtado le jale las patas a su tocayo en Palacio el dia de la reelección. En nombre de nuestros hijos y ancestros se lo agradeceremos.

sábado, octubre 29, 2005

Exciting programming to the network/channel!

intermittent miniseries? a serial storytelling medium!
Capping an extraordinary conservative furor?
well, not even trash can guarantee a happy ending!
we luv ya jesus!!

jueves, octubre 20, 2005

Cierre de ediciones


Estimados lectores,

“Siempre es un cuerpo el que hace sombra a otro”.


Existe una oscura y recurrente imagen, en la cual la vida humana es, en su mayoría, un proceso para llenar el tiempo hasta la llegada de la muerte, con poca o ninguna selección en cuanto a las dependencias, negocios, ministerios, pactos, transacciones (o entregas personales) que se van a tramitar (o procurar) durante esa larga espera.

Creemos, sin embargo, que ésta no es la respuesta final, y seguiremos tratando de dar un paso más allá dentro de este nido de víboras continuo y carente de estilo que es nuestro (el de todos) círculo de afecciones.

Edicines clínicas momentáneamente cierra sus casos clínicos debido a la pérdida de uno de sus editores. Los siguientes, son los últimos apuntes de éste editor y no constituyen una entrega presentable a los lectores, sino más bien unas breves notas de lo que se tenía en mente antes de partir. A todos aquellos ya ausentes, recordamos que la únión nos hará libres, porque somos idea. Hasta un nuevo encuentro.

El afecto. es la huella de un cuerpo sobre otro, el estado de un cuerpo en tanto que sobrelleva (o padece) la acción de otro cuerpo. Entendemos ‘cuerpo’ como entidad, como sujeto, como existencia, como ente, como identidad.

De esta manera el afecto es la huella del otro sobre nuestro ser; llevada constantemente en nuestro interior dentro de un flujo de demostraciones y dentro de un conocimiento del otro cuerpo por la sombra que ejerce sobre el nuestro. Affectio, efectos, afecciones, estados dolientes, latentes, etc.

Este estado de mi ser, esta afección no es una representación, sino una realidad psicológica dentro de un repertorio limitado de estados del yo a los que soy arrastrado por la presencia del otro.

La afección no es por lo tanto sólo el efecto instantáneo de un cuerpo sobre el mío, también tiene un efecto sobre mi propia duración, placer o dolor, dicha o tristeza. Se trata de pasos, de devenires, de subidas y de caídas, de variaciones continuas de potencia, que van de un estado a otro. Son signos de crecimiento y de disminución, del tipo dicha-tristeza.


Conocemos nuestras afecciones por las ideas que tenemos, sensaciones, percepciones, éstas expresan nuestro estado en un momento del tiempo y se distinguen, de este modo, de otro tipo de estados conyunturales de nuestro ser. El estado actual es siempre una sección de nuestra duración, y determina en este sentido un aumento o una disminución, una expansión o una restricción de nuestra existencia en la duración.

El presente editor en busca de nuevas ideas y afecciones, cuerpos, y estados del yo, parte hasta que una nueva realidad psicológica acelere la larga espera. Definitivamente, en todo drama hay una burla.

jueves, septiembre 29, 2005

La naturaleza es P.A.S.

Cartilla institucional


¿Sabía ud.? ¿Que en estudios científicos conducidos recientemente se descubrió que en el 82% de los casos todas las personas sufren crisis depresivas y de histeria debido a la insuficiencia e ineficiencia que demuestran en su desenvolvimiento en los círculos relacionales? Esto quiere decir que la mayoría de nosotros estamos propensos a llevar una existencia miserable debido a una natural predisposición al fracaso social. Dado que sólo un porcentaje muy ínfimo de la población maneja la mayor parte de los capitales sociales (dinero, trabajo, belleza, conocimiento), el costo de la obtención de esta clase de información resulta demasiado elevado para aquellos que aún creemos que la mejor estrategia para el éxito en la colectividad es salir en pantaloneta y sin camisa a deambular por el barrio en busca de incautos que acepten la tediosa labor de saciar nuestra hambre de atención y afecto. Ante esta alarmante situación, Ediciones Clínicas, con la colaboración del Centro de Apoyo para el Mejoramiento de la Expectativa de Vida del P.A.S., ha reunido la opinión de expertos científicos sociales sobre el tema, y ha logrado elaborar una cartilla institucional que reúne los más increíbles secretos acerca del arte de creación del falso 'self' y de la magia que envuelve el 'hacer creer', tan celosamente guardados por nuestra decadente burguesía. ¿Está cansado de una existencia sedentaria frente al televisor y al computador? ¿No soporta más la angustia por la ausencia de un mañana plagado de amistades mediocres y de constupraciones fugaces? Entonces nuestra solución es para Ud. ¡Nuestra cartilla le enseñará cómo ser todo un farsante en el desenvolvimiento social y no ser descubierto en el intento! Diviértase en reuniones familiares, eventos sociales y profesionales, establecimientos públicos y esquinas. Sorprenda a familiares y amigos con su nueva y fácil forma, indulgente y descarada, de redirecionar el deseo de los demás hacia los designios de su triste persona ávida de reconocimiento y de aceptación. Gracias a la valiosísima información recaudada durante décadas de observación meticulosa y al testimonio empírico de los más avezados expertos en el tema (i.e. pseudoartistas plásticos, estudiantes de diseño industrial o gráfico de universidades privadas, 'donjuanes' de cuadra o 'chayannes' de vereda, vendedores de boutiques de ropa de marca, homosexuales, profesores univesitarios, entre otros), Ud. adquirirá las facultades suficientes para aprovechar cada hipótesis fáctica relacional posible y acomodarla a su arbitrio, con el fin de lograr la importancia social que siempre ha anhelado. Pasará de ser un insignificante cero a la izquierda a ser una persona absolutamente imprescindible para la existencia de los demás, a través de la adulación, la charlatanería y la proyeción artificial de cualidades loables que jamás poseerá. Será todo un maestro en la creación de falsas expectativas, creando en las gentes un sentimiento de total aprehensión (y de obsesión) hacia su persona y les hará sentir en carne propia la imposibilidad (aparente) de satisfacer las añoranzas que tienen respecto de sus 'elusivas' dotes personales. Dominará a la perfección los códigos lingüísticos y fonéticos actuales para lisonjear e insultar -desapercibidamente- a la vez, para engañar y desviar la atención de sus verdaderas intenciones y para lograr toda clase de prebendas siempre a costa de esfuerzos ajenos; tanto así, que conocerá el poder de palabras como 'tenaz', 'huevón' y 'O.K.' a través de su repetición 'ad libitum' y 'ad infinitum'. Descubrirá el secreto de la dominación de mentes en la pandemia de la drogadicción, y muy pronto se asegurará un ejército de humanoides esclavos a su servicio con la continua apertura sesámica (0) de sus blancuzcas fosas nasales (1). Pondrá a prueba su nueva experticia en la escogencia de un modelo idóneo y masificado de apariencia, en el que jamás se cuestione su aspecto exterior, porque podrá reproducir a la perfección los desabridos y desatinados usos estéticos del común denominador (2).
Llegó el momento de decidirse y sólo en Ud. está el poder de elegir. ¡Llámenos ya! 01-9800-PERSONA. Nuestras operadoras le están esperando. Seguramente estará preguntándose: ¿por qué hacemos esto por alguien como Ud.? Porque en Ediciones Clínicas no te devolvemos tu vida: te la fabricamos.
- - -
(0) ¿Derechos de autor?
(1) Pitillo para aspirar pérez no incluido. Pérez vendido por separado.
(2) Haremos descuentos sobre peluqueados estilo 'ñero' paisa disfrazado de punkrocker ochentero, sobre tenis North Star (si no hay plata para los Converse), sobre jeans Diesel con defectos de manufactura, sobre calentadores de pierna y sobre la decoloración de mechones.

domingo, septiembre 25, 2005

El ejército de salvación

Hermanos,
El poder cambia singularmente de naturaleza, de expresión, de distribución, de intensidad, de medios y de fin(*). Debemos liberar nuestra alma individual de ésta ganga inútil que es la religión.
La religión es sobre todas las cosas un error político. El cristianismo solo se compone de monstruos ocultos que pretenden un alma colectiva dentro de una tiranía sacerdotal. Es la doctrina del juicio, que se presenta como un ejército de salvación conquistando medios de expresión y fuerzas populares. Finalmente lo que se quiere con esta alma colectiva es el poder. Final y principalmente quiere un poder último que no apele a los dioses sino que sea el de un Dios sin apelación y que juzgue a todos los demás poderes. ¡Es el Contrapoder!
¡La religión, la mayor multinacional de todos los tiempos! ¡Aleluya!

(*) DELEUZE, Gilles. Crítica y Clínica. Ed. Anagrama, Barcelona, 1997, p. 58

viernes, septiembre 23, 2005


en éstas supuestas cárceles y encierros
sé que hallo mi libertad
hasta pronto

lunes, septiembre 19, 2005

Vuelve nuestro corresponsal

Estimados!
Ha vuelto el creador del famoso "camión de la basura". ahora renovado (o purgado) se convierte en nuestro corresponsal desde Buenos Aires (porteño o portentoso?). Celebramos las notas de éste corresponsal con dos definiciones que no están en el diccionario y que constituyen los dos pilares de nuestra clínica crítica:
futuro: tiempo aún libre de lamentaciones
Conspiración: lejos de lo que se piensa... inspiración conjunta!
Bienvenido dios del "vudu". eres de los nuestros

ADIOS A MI PERRA
A veces me pregunto por qué tantos amigos circunstanciales. En cada periodo aflora una nueva marejada de amigos; llegan a nosotros y tienden su carpa: cartilla, bronceador y demás corotos de turista. Habitan entre nuestros afectos, escrutan la fosa de la melancolía, el absurdo y el hastió; viven una o, a lo sumo, dos temporadas haciéndose pasar por nuestro alter ego. Y en la madrugada del decir adiós, al colgarse sus mochilas al hombro, nos privan de una última mirada por el rabillo de sus ojos. Amigos que olvidaron sacar la basura de lo que otrora fuera su carpa. A veces me pregunto por qué tantos amigos circunstanciales. Amigos que no recuperaremos en hospitalarias cafeterías al pie de la autopista, (espacio idóneo para el encuentro del crimen y el fracaso) porque detrás de la vidriera estarán siempre ellos en el frente canicular: atareados con lentes para el sol y los complejos mecanismos de sus autos.

lunes, septiembre 12, 2005

Casos de la vida real


Estimados Usuarios,

En flagrante violación al juramento de Hipócrates, hemos decidido renunciar, momentáneamente, al secreto profesional para compartir con ustedes el siguiente testimonio vivencial de una de nuestras pacientes quien supo sorprendernos con el siguiente mortificante relato al mejor estilo château saignant, digno de cualquier comensal gordo, en cuanto a acciones simbólicas se refiere. Damos paso entonces a un banquete de prolija destreza sin sentir el más mínimo cargo de conciencia teniendo siempre en mente que el silencio es también traición.

“Respetado Doctor:
Siempre he tenido la ventaja (o la desdicha) de olvidar fácilmente las cosas, especialmente las cruciales etapas de mi vida. Una reunión con las compañeras del colegio trajo a mi mente un leve recuerdo del cual se ha desenvuelto la mejor empresa que haya realizado en mi niñez. No suelo contar estas cosas, especialmente por los desagradables hechos (un poco carniceros, sangrientos y podridos) que a continuación relataré; hoy hago una excepción debido a que a lo mejor ya no tenga cómo recordar tan buenas cosas.

Estaba divertidísima escuchando los cuentos de aquellas amigas, cuando sacaron a relucir la época en que las monjas no me dejaron usar más el uniforme. Una hora más tarde ya estaba en mi casa. ¡Claro, lo recuerdo perfectamente! Habían anotado en mi observador que yo era una persona en contra de los principios y valores franciscanos, una persona no apta para estudiar en aquel colegio. Tenía entre 10 y 12 años y me prohibieron usar el uniforme del colegio durante 6 meses. Era una crueldad a esa edad, especialmente porque yo realmente no había hecho nada mal. Al principio fui una semana con los tres únicos vestidos que tenía, me los había mandado mi abuela y eran una especie de traje "típico", elegantes y delicados. A la semana mi papá -sabiamente- solucionó el problema mandándome a confeccionar un uniforme "especial" para mi. Era una copia del que él había usado en el Colegio La Sagrada Familia: pantalón corto negro, chaqueta llena de bolsillos por todos lados, negra, una blusa llena de plieguecitos blanca y, en vez de la corbata para niño, dos cintas negras que se ataban como un moño. Inclusive me cortaron el pelo y me peinaban de lado con gomina. Como quien dice: "a imagen y semejanza".

Siempre había izado bandera por mis buenas notas, ahora con la disciplina perdida ya no podría izar bandera de aquí en adelante. Pero eso no es ni lo peor ni lo mejor de todo. Para poder seguir adelante con lo que sucedió tengo que dar a conocer cosas, que me avergüenzan, pero que son necesarias para entender lo que pasó.
Así, a temprana edad y precozmente me desarrollé. Afortunadamente no fue un desarrollo normal, fue más bien como una enfermedad. Prepárense para lo que viene. Era sangre y sangre y más sangre. Durante tres meses sangré sin parar. Eran unos coágulos enormes, era una cosa exagerada para una niña de mi edad. Durante 15 días no pude ir a clase, luego con medicamentos y todo lograron que no me diera anemia aunque había perdido ya mucho peso. Cuando volví al colegio empezó mi venganza…

En medio de mi desdichada enfermedad tenía que ir al baño constantemente, era una cuestión de salubridad inmanejable y estaba tan mal de salud que a veces me desmayaba de la sangre que había perdido. No exagero.

En fin de cuentas di inicio a la mejor serie de crímenes que a nadie se hubiera imaginado. Espero no perder el respeto de usted después de esto, comprenda que solo era una niña irracional. Se me ocurrió algo. Los baños eran cuartos enormes con pequeños cubículos donde estaban los inodoros. Había baños en cada ala del colegio y en cada piso. El tamaño de los cubículos facilitó mi trabajo. Durante los recreos me dediqué a dejarme desangrar. De cada coágulo salían cantidades generosas e increíbles de sangre. En media hora ya tenía el cubículo bañado desde el techo hasta la manija de la puerta. Y no era una sola pasadita, me encargaba bien que cada pared goteara hasta la inmundicia.

Cada ranura entre las baldosas blancas quedaría para siempre "carchada" de sangre humana. El piso estaba tan resbaloso y el agua del inodoro tan espesa que yo misma tuve que contenerme para no vomitar. Evitar que se me ensuciaran las medias blancas hasta la rodilla fue lo más complicado de la empresa.

Como si nada salí del baño y entré a mis clases. La primera victima fue una de 9C. Yo estaba en 5B. Era primaria todavía. ¡Los gritos eran terribles! Luego todo el mundo corría hacia el baño, luego solo los profesores prohibiendo el paso a los demás. Luego llegaron las monjas.
Al principio se pensó que se trataba de un aborto. Una de las muchachas había abortado en el baño. Todos los pedazos de coágulos parecían restos de humano despedazado, el piso restregado y ensangrentado, la sangre seca que atraía las moscas, era realmente todo un desastre que nadie quería, por supuesto, limpiar. Me sorprende ahora que no hayan llamado a la policía.

Así, día a día con mi distinguido uniforme y pensando en las izadas de bandera me dedique pacientemente en cada cubículo de cada baño. Luego se pensaba que estaban haciendo sesiones de brujería en los baños. Luego que el diablo estaba suelto, luego que estaban matando gente. Que era un trabajador o una monja asesina. ¡Contaban a las niñas diariamente a ver quien faltaba! Yo por mi parte hice de la adversidad y la enfermedad mi mejor sombra para pasar bien.

Inclusive llegué un día a abusar. Las monjas en la misa se sentaban en la primera banca. Era una banca especial pues era abollonada. Pues bien, me dediqué a la banca. Al oprimir la espuma brotaba en borbotones la inmundicia. Al secarse todo fue desagradable. Tuvieron que tirar la banca y sentarse en una de solo de madera.

Finalmente me curé y todo esto quedó impune, lentamente mes a mes trataba de repetir en términos mentales aquella feliz época en que sin evidencias que mancharan mi nombre me dediqué a evitar el gorgoteo repugnante del presente, en la mejor venganza contra la pasiva rutina y la aplastante religión”.

jueves, septiembre 01, 2005

El Mundo Pide P.A.S.

El P.A.S. concibe el Mundo como ente pluralista y es éste el principio rector de su cosmovisión. Cabe hacer explícito que dicho Pluralismo difiere del trillado discurso del Pluralismo-ambiente usado y abusado por tecnócratas. De este modo, el orbe, aprehendido como espacio y medio de lo plural, no se limita a concesiones democráticas en pro de la sacro-santa Tolerancia. ¡No! Hablamos de algo más, de orden superior a la intocable Democracia, algo que no tiene mayor discurso que el contenido en las definiciones de Identidad y/o Diferencia. Entendemos la Identificación o la no-Identificación ('diferendos') como procesos pulsionales que no requieren mayores justificaciones.

Así, nuestra comprensión el Mundo, mosaico homo sapiens, vitrina compuesta, a través de esta simplificación excluye sesgos y circunloquios innecesarios. El Mundo es el Mundo, tratamos de nombrarlo más no de reformarlo. Tomaría una enorme Tiranía buscar alguna idea de validez universal. Validez y Valor son conceptos que solo tienen cabida en la mente de un mercader o de un moralista. Estos dos sofismas, constituyentes de la Weltanschauung
actualmente dominante, fueron, son y serán las taras congénitas del discurso demoliberal. Desahuciamos dicho discurso y desde hoy prevemos su fin. ¡No! No se trata de visiones proféticas ¿O sí? Somos conscientes de que todo ejercicio del poder corrompe pero como (todavía) no tenemos poder: todo OK. Dentro de un mundo que vemos así, seguimos siendo mansas cabras aunque comamos latas. La ficción que es la Especie Humana, es una facilidad conceptual de la Biología. Maldito el momento en el que dicho concepto se cruzó con la teorización política y las ideologías. A nuestros ojos, los Derechos Humanos no son más que plurales siglas. Dos D's seguidas de dos H's mudas.

No hay ningún derecho natural, sólo hay mentiras positivas. Y nuestro único derecho como Especie es quizá la Dignidad, colectivo Deber. El P.A.S., contra viento y marea, señala estos sofismas con un dedo ensalivado izado a estribor. A decir verdad, nos hubiera gustado militar por esta misma causa principios del s. XVIII. Dos siglos después, la visión binaria del Mundo y la Mala Fe de cuantos ojos lo miran nos provocan más que lástima, vil vergüenza ajena.

El primer paso hacia el Nuevo Mundo (que nada tendrá de nuevo) es corregir la miopía y la presbicia. Debemos admitirlo, a nadie le cabe el Mundo en la cabeza, así su héroe sea la anhelada capacidad de abstracción.

Repitamos con nostalgia y humildad el célebre aforismo, cada vez que nos hablen lo global: *"No conozco al Hombre, conozco a los hombres". *Es decir*,* a personitas con nombrecitos, antes de podernos apiadar y decir soberanamente *"pobrecita la gente". *Aun así estos seguirán siendo comportamientos pueblerinos de aldeano global.

Para mayor información basta referirse a la cartilla *"Urbi, orbi y más"*editada por el P.A.S, en cuya primera lección se enseña por igual a recién llegados e Infantes Simbolistas cuáles son los Pueblos de este Mundo. Es que el Mundo se compone de *Pueblos*, no de Estados o mal-llamados Estados-Nación como nos han venido haciendo creer. Por eso odiamos la Geografía Política, la Demografía, la Economía y demás falaces ciencias oficiales. Sabemos que hoy somos 6 billones de puntos en un mapa, pero con zanahoria y garrote, un par de mutaciones y caos-mediante nuevos ojos (negros, claros y rasgados) podrán ver un nuevo Mundo. ¡De veras! Vale la pena dar la lucha.

lunes, julio 18, 2005

Bienvenidos al placeródromo

Sólo quienes entienden que es necesario sentir el menor interés por vivir han comprendido que la necesidad y la ambición son los motores fundamentales de la fugacidad de las sensaciones y de lo efímero de los sentimientos, características básicas del pensamiento mundano que constantemente amenazan con la defraudación de la expectativa que hace surgir una determinación acerca de una postura individual al interior de una relación cercana: el precario sentido que rápidamente se forma con la indulgencia desenfrenada de las pasiones y con la extirpación autocomplaciente de las culpas se esfuma entre los dedos de quien, movido por la estupidez y por la deslealtad propias del mezquino y obtuso común denominador, ha sido deslumbrado por el espejismo del espectáculo vulgar de salidas fáciles que ofrecen a precios módicos una emulación triste y deformada de la felicidad o una tajante estafa remedo de paliativo. En últimas, esta plausible falta de carácter y entereza no es más que una traición al propio 'yo', la imposición de una falsa personalidad sobre una ausencia de personalidad que aplaca en forma mediocre aquella angustia impostergable, compuesta por el aburrimiento y la desazón constantes que son pulsión fundamental de vida: la fuente de la luz que nos hace seres repetibles pero con defectos particulares de fabricación cede a la oscuridad de una experiencia sensorial perpetuada sin interés serio ni legítimo, obligándonos a ser partícipes de una denigrante deformación de la humanidad en el concepto de 'persona'. Cuando la liberación de los instintos básicos parecía ser la consigna de la auténtica emancipación, hoy en día esa satisfacción sensorial ha degenerado en una subyugación subjetiva casi anhedónica, contraria a la identidad. Los individuos han dejado de encontrar significado en sus deseos y aspiraciones debido a la represión que ejerce la materialización de la emotividad, que impunemente ha logrado permear cada estamento de la cultura, desconociendo que esa emotividad sólo puede ser aprehendida en instantes mínimos en los que conocemos la verdadera belleza: la belleza de ser idea.

domingo, julio 03, 2005

Lineamientos para la acción simbólica: P.A.$.

El oro siempre será el oro. Sin embargo, ¿son el mismo oro el de coronas y museos y el de bóvedas y bancos? Hay en el mundo algunas cosas cuyo blasón honra la pátina de la Historia: son aquellas cosas susceptibles de valor simbólico. El valor simbólico, único verdadero producto social, al que nuestras manos e imaginarios se entregan con placer y sin saberlo, es sin lugar a dudas la fuente de la belleza de este mundo. Sin él, la humanidad es tan grotesca como una toalla higiénica de 5 millones de años o semen en un lavamanos.

Desde el P.A.S. hemos visto la complejidad semiótica de 5 años de estudios (y posgrados) sucedida la simplicidad del drama de un desempleado. Visiblemente ya no es la peste el drama contemporáneo. Tras un largo suspiro, las gentes capitalistas en su sed de dinero fácil parecen haber olvidado un viejo estándar de la ética societal: han sustituido con el valor 'dinero' el valor 'trabajo'; trabajo loable no por su contraparte -resultante de una simple venta de mano de obra- sino por su investidura social, aquella que permite la inserción con rol en la sociedad, la interacción con pares en condiciones más o menos equitativas y la preservación de algo tan básico como un dar y recibir en el que ambas acciones generan sentimientos de satisfacción y/o gratitud. El funcionamiento del mundo, desprovisto de estas dos componentes puramente simbólicas, más allá de carecer de belleza, lo reduce a una enorme aunque millonaria 'transacción'.

Así, en el sistema de hoy, regido falsa o verdaderamente por un tedioso 'what you see is what you are getting', no podemos constatar otra cosa que la pérdida del valor simbólico, otrora consubstancial a la mayoría de nuestras acciones. La desaparición paulatina de esas mentiras blancas que hacían noble toda nuestra mezquindad. El P.A.S. trata de explicarle esto a capitalistas y consumidores en el limbo con discursos sobre la necesidad apremiante de una toma de conciencia al respecto del valor simbólico. Lejos de tratarse de un endoctrinamiento, lo hacemos por afán de preservar y tal vez restaurar la belleza general del mundo. Nos gustan las polillas tanto como la Coca Cola. En nuestra difícil tarea, se nos antoja pensar que este esfuerzo no es en vano; sin embargo, las mayorías siguen viviendo encandiladas por la promesa del mañana, sin ni siquiera tener el hoy y, lo peor de todo, olvidándose del ayer.

Todo lo que hacemos es un potencial símbolo, y un símbolo, si nos remitimos a su etimología y a lo que le queda de símbolo, refiere a la unión de dos partes hic et nunc u otrora en la antigua Grecia: el sublime encuentro entre la imagen mental de un mortal y la mirada de otro mortal, aquel milagro efímero y humano de la reciprocidad, la posibilidad infinita de amoríos a primera vista. Nos gustan las polillas tanto como la Coca Cola y nos gusta compartirlo. Ya lo decía Marguerite en divina boca de otro : "El catador de belleza termina por encontrarla en todas partes". Queremos un mundo en el que la gente diga 'gracias' maravillada, el mismo mundo en que la gente aún dirá 'de nada' en una inmensa acción de nada.

miércoles, junio 22, 2005

Consejos para los inveterados

Una guía práctica de Ediciones Clínicas para aquellos maduritos con síndrome de James Dean agravado por la geriatricidad y la ridiculez desaforadas:

Si ud. es un viejo macho cacreco, todavía está a tiempo de retirarse con estilo!

Sólo ponga en práctica esta hermosa filosofía que tan gustosamente hemos de compartir con Ud. en el bello día de hoy:
"Mínima alma mía, tierna y flotante, huésped y compañera de mi cuerpo, descenderás a esos parajes pálidos, rígidos y desnudos, donde habrás de renunciar a los juegos de antaño. Todavía un instante miremos juntos las riberas familiares, los objetos que sin dudo no volveremos a ver... Tratemos de entrar en la muerte con los ojos abiertos..."

Ningún vejete con traumas de dandy adolescencial tiene derecho a sentirse como Mark Renton... Su juventud ya pasó, desperdiciada o aprovechada, ofrecida o rechazada, y lo único que le queda por hacer es entregarse a la parsimoniosa descomposición de la carne y de la mente, a resignarse a que sus verdes deseos ardan en las profundades del hades, esos verdes deseos que acompañan a sus "buenas intenciones" -sin importar qué digan Hollywood o Koffee Onán sobre la 'superación de los desvalidos'-... Qué sentido tendría para el profesional exitoso, rodeado de preces y de reconocimientos
ensalzables, preguntar si Iggy Pop debe sucumbir ante Underworld? Si la heroína debe sucumbir ante el auge del éxtasis? La arepa cósmica se voltea: qué sentido tendría convertirse en un profesional exitoso, rodeado de preces y de reconocimientos ensalzables, para terminar siendo un vegetal asqueroso, rodeado de bedeles y de medicamentos sedantes? Será que a esta decadente altura la naturaleza ya ha hecho un hombre? Hay alguna necesidad de dejar de seguir cometiendo estupideces para seguir cometiendo estupideces, pero de aquellas que son institucionalizadas o plenamente aceptadas? Claro, ellos ya están exentos de cometerlas, dice la eficacia simbólica.

Aviso parroquial: Si aún no ha logrado captar la importancia de este comunicado, por favor pida una cita con el Dr. Kevorkian. Hágale un favor a la humanidad, vejestorio, no dé más lata! Las miles de quinceañeras estúpidas que se creen complacidas con su miembro fláccido y con su cuerpo arrugado -debido a su innata falta de cacumen- se lo agradecerán!

Justicia y P.A.S.


Si queremos hablar de Justicia no podemos estar de acuerdo con concepciones
estáticas de la virtud. Para el P.A.S, la virtud, en pleno aunque torpe
movimiento, debe ser algo que nos trasciende, como el fuego de Prometeo, un
ideal inalcanzable. Así, aquel iluminado por la virtud debiere estar sujeto
a una intensa acción de gracias por dicha gracia antes de someter a su
juicio al no-virtuoso.

No se trata de pajas, postes y ojos ajenos. ¡No, no, no! Simplemente de
tener en cuenta que aquella ingrata omisión del estado de gracia funda la
ineficacia de la justicia en la forma como la vivimos, concebimos y
ejecutamos, en su estado actual. No se puede hacer justicia segregando. Las
posturas rígidas sobran, de seguir así la humanidad se irá de bruces, con su
dedo apuntando, con su balanza que pesa y sopesa sujeta siempre a la
gravedad terrenal.

¿Podríamos hacer abstracción de la individualidad del acusado antes de
juzgar? ¿qué significa la pretendida igualdad ante la Ley? No sin antes
referirnos a "Dura lex, ruanus lex" -piedra jurídica angular del P.A.S,
quisiéramos dejar en claro que la moral acartonada nos sabe a manual. La
defensa actual de la justicia, o bien de las otras virtudes, tal como es
llevada en nuestros días, se funda sobre la estigmatización de la desvirtud,
sobre la siembra de la desunión.

Algunos pretenden que la Justicia cabe en una pregunta cerrada, que en un
par de alternativas cabe una historia de vida. Pues bien, el carácter
diferencial ha de ser superado, al fin y al cabo estamos hablando de lo
absoluto y esto no tiene nada que ver con jueces ni expedientes. ¿A qué
punto la modernidad ha separado la justicia de la Justicia? ¿El juicio es el
juez? La verdad sea dicha: ¿El veredicto sigue siendo la verdad? No queremos
más verdades fácticas, la Ley es poesía, no industria editorial; su
aplicación debe ser como música ejecutada al interior de un colectivo, como
un ligero correctivo de armonía para la cacofonía social.

Vemos entonces que siglos de sistematización de enfoques punitivos no nos
han ayudado en nada a entender nuestras fallas, que apenas nos hemos
enclaustrado en un talión sofisticado. Exconvictos, prófugos, criminales de
pensamiento, en cierto modo, P.A.S es su partido. En esta época en la que
todos las miradas se voltean, en la que sin pudor se lanza la primera
piedra, por el placer sadomasoquista de la pedrea, hemos de entender la
necesidad de abogar por el diablo, de compensar con o sin razón los abusos
de la mayoría, las taras hereditarias de la ley.

Nos gusta pensar que la Historia es sola juez. En sus cómodos y graciosos
plazos, muy a posteriori, se puede contemplar (antes de acusar), entender y
perdonar la mezquindad humana e incluso prever una futura compensación que
no es revés para nadie, que finalmente nos revela que nunca hay ni habrá
Justicia, ni civil ni divina, sólo Justeza. Lamentamos que en nuestros días,
aparte del olvido, casi nada esté basado en el perdón.

Idolatramos por costumbre, atracando en el que creemos buen puerto, a la
estatua de la Justicia con su hilera de pestañas enyesadas, una toga y una
peluca y otras payasadas. Obramos. El misterio de la Injusticia aún no nos
ha sido revelado y mientras tanto seguimos lanzando ladrillos hacia arriba
en esta tierra, sorprendidos todavía de que nos caigan en plena jeta.
Queremos que la Justicia, como la Justeza, sea la acción simbólica de
ninguna mano. Lamentamos que en nuestros días, aparte del olvido, casi nada
esté basado en el perdón.

sábado, junio 04, 2005

PARTIDO ACCIÓN SIMBÓLICA

El Socialismo es como una manita que coge la flor. P.A.S. es la flor. No nos hemos dado cuenta de que el progreso humano nos hace desear todas las cosas que nunca podemos tener. ¡No! Por el contrario, hemos avanzado en la ruta de constituir un partido, libre y simbólico para los engañados. Nuestra meta principal es el amor de lo público, en detrimento de las ambiciosas ambiciones del sector privado.

La verdadera Anarquía es el Cinismo. El objetivo de la sociedad es su aburguesamiento: educar déspotas ilustrados. ¡Nosotros somos idea! El susodicho Despotismo sale en todos lados, por la razón o por la fuerza, y la gente escogerá si entra con vaselina o con arena.

Nuestro programa es simple:

1. Programa para la Reducción –y Erradicación- de la Violencia Simbólica. (PREVS): Supresión de la desigualdad (no tanto lobo en la ciudad). Castigar la ostentación y la suntuosidad, reducir la fractura social en el imaginario. Hace falta recordar el texto fundador de éste, nuestro partido, el P.A.S: “La desigualdad antojadiza debe desaparecer, sobre todo si es impuesta a dobles y a mandobles, a fin de evitarnos males mayores y consecuencias funestas con sabor a ‘inquina’” - EGM.

2. Programa para la Restauración de la Buena Fe (PRBF/Bonafides): La Buena Fe es el verdadero hilo del tejido social. Habrá penas para las actuaciones de Mala Fe. Se publicarán listas de ciudadanos no gratos, habiendo incurrido estos en provocación de la desconfianza. Cada ciudadano, por delegación intransferible del Estado, es garante de la Buena Fe en sus relaciones sociales. Los infractores deben ser castigados por defraudar la expectativa social. No olvidemos que el Capitalismo reposa sobre la Mala Fe. Para acabarlo, el Estado destinará recursos para la provisión de Oxitocina para todos.

3. Centro de Apoyo para el Mejoramiento de la Expectativa de Vida (CAMEV): El Estado se encargará de recordarle quién es Usted.

Ninguna medida jurídica pasará sin campaña de seguimiento pedagógico; es pretencioso, ya lo sabemos, pero el aparato legal reposa sobre la ficción de que ninguno ha de ignorarle. Por ello, es una obligación del Estado procurar la difusión de la coacción subjetiva. Esto quiere decir todo pero no quiere decir nada.

Haremos Revisionismo, reciclaremos tiempos pasados para hacerlos mejores. La nostalgia de la memoria nos hará unitarios.

El P.A.S. emitirá sólo pronunciamientos ideológicos. Alineamos a la izquierda y no justificamos. Sus mítines tendrán una dimensión ritual. Al final llegaremos a la afinidad, a la homogeneidad ideológica, pero a las diferencias de personalidad.

http://www.accionsimbolica.org.co

viernes, abril 29, 2005

All thumbs up!

En la conjura de las apariencias se agarra, de donde pueda, aquel lastimado (¿o mejor lastimero?) arraigo interior que nada tiene que hacer ya sino silenciosamente rechinar sus dientes dentro del comportarse 'más correctamente'. Para sostenerla, es preciso desearla desde la interioridad (desde la ambición, los medios, la carencia o la necesidad, he aquí la fuente del problema) para luego legitimarla con los demás. "Comienza comprando tu deseo, y luego tan sólo realízalo". Una imagen vale mil palabras como lo es la ortografía en un tratado o el agradable desempeño en un fabuloso entorno social. Tal vez el intento cobre la cordura, la autenticidad, los matices de carácter o la historia y la memoria individual (inclusive esto suena cursi). Persuadirse persuadiendo termina siendo un proceso ya no tan doloroso cuanto rutinario. Mas ésta no es la clave del éxito. Por más esfuerzo personal (personal best) que se haga, la importancia de la conjura de las apariencias está en entender, mejor, en deducir, abstraer el ideal identitario (más rápido que otro), para replicarlo de la mejor forma posible (o inclusive una forzosa adaptación), en nuestras dotes y características. Hay quienes son políticos de sí mismos, hay quienes son su propio mercadotecnista.

Autopresentación, buen efecto manteniendo en la clandestinidad la tolerancia cero son las alternativas de otros. Al final todo se confunde o se concluye en una fantástica fórmula 'actitud-imagen' que terminará siendo lo mismo. Un excelente esquema 'merge into one' que dará como resultado el ideal (the goal) en mente: "En boga". La contundencia de la imagen se entiende, entonces, ya no en el (siempre notorio y patético, más aún por parte de la clientela femenina) esmero personal por lograr la correcta compostura visual sino que es también necesario llevar (o presumir de hacerlo) una postura de vida que por lo general (santandereanos y rolos) se traduce en una indiferencia relajada (relajada y autoconfiada, pues al fin y al cabo todos tenemos nuestro propio 'image duplicator').